La inflación más rápida en décadas y la consiguiente prisa de los bancos centrales por aumentar las tasas de interés están avivando los temores de recesión en los mercados financieros, preocupaciones que se ven agravadas por el impacto de los bloqueos agresivos por coronavirus en China y la guerra en Ucrania. Solo en la última semana, EE. UU. y el Reino Unido registraron la inflación que más se aceleró desde principios de la década de 1980 y los bancos centrales de Canadá y Nueva Zelanda proporcionaron un modelo para la Reserva Federal de EE. UU. y otros al aumentar las tasas 50 puntos básicos por primera vez en 22 años.
Bank of America Corp. informó que los administradores de fondos estaban más pesimistas que nunca sobre las perspectivas de crecimiento y JPMorgan Chase & Co. aumentó sus reservas para protegerse contra un deterioro económico. Mientras tanto, Sri Lanka y Pakistán cayeron más profundamente en las crisis cuando las Naciones Unidas advirtieron sobre una «tormenta perfecta» para los países en desarrollo a medida que suben los precios de las materias primas, la Organización Mundial del Comercio recortó su perspectiva para el comercio y busca «recesión» en Google y la Terminal Bloomberg. claveteado.
Con ese telón de fondo, los formuladores de políticas se dirigen a Washington esta semana para las reuniones del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial. El Fondo ya está diciendo que la guerra significa que rebajará sus pronósticos para 143 economías este año, que representan el 86% del producto interno bruto mundial.
“Nos enfrentamos a una crisis además de otra crisis”, dijo la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva.
“Para la economía global, el impacto combinado de la guerra y el coronavirus será un año de menor crecimiento, mayor inflación y mayor incertidumbre. Para llegar a la recesión, necesitaríamos ver más shocks. Rusia cortando el suministro de gas de Europa o el bloqueo de China que se expande desde Shanghái a otras ciudades importantes son posibles catalizadores”.
Cruces en fx para la próxima semana
EURUSD se mantiene sobre 1.08 con alto potencial comprador. Los mínimos anuales se redujeron a 1.0770 (precios que no se veían desde el comienzo de la pandemia en 2020). Las compras aún no logran la suficiente acumulación para posicionarse sobre 1.0830. Por tanto las estrategias se mantienen en venta desde 1.0790 a 1.0770 y posible extensión 1.0750. La semana trae datos de producción alemana el día viernes con resultados no optimistas para la Unión Europea.
GBPUSD se mantiene vendedor debajo de 1.3050 hasta 1.3033. Debajo de 1.3030 entramos a la base de compra de 1.30 y 1.2990. Esta semana será crucial para los compradores de libra. La estrategia se mantiene vendedora debajo de 1.3050. Mientras que los compradores están atentos a los niveles de 1.3080 para posible posicionamientos hasta 1.31. y 1.3120.
USDJPY se mantiene comprado. Los niveles de compra siguiente comienzan en 126.50 hasta 126.70 con extensión 127.0
USDCAD se mantiene mixto en los niveles de mercado actuales. Debajo de 1.2640 y 1.2650 el cruce se encuentra testeando máximos. La base compradora se mantiene entre 1.2550 y 1.2540. La preferencia estratégica se mantiene vendedora debajo de 1.26.
Commodities oro y plata se mantienen en compra. Oro sostiene compras desde los niveles de 1950.0 y plata se sostiene compra desde 25.0. La preferencia se sostiene a la compra en las commodities. Los precios actualmente se encuentran altos y es posible esperar tomas de ganancia durante la semana entrante.
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